Vivir soñando...¿Es no vivir?
Sueños y reflexiones.
Escribir en primera persona es un "recurso literario"
Por tanto no soy la protagonista de estas historias...
o...¿si?
Nadie da lo que no tiene. Lo que tenemos lo hemos adquirido de muchas maneras, lo hemos hecho nuestro, y nos hemos construido desde esas historias. Pero no nos confundimos con ellas necesariamente. El recurso literario ni nos agota, ni nos sustituye. Vale soñar, ¿por qué no? sin olvidar que los sueños, sueños son.
Gracias por tus palabras, querido Preludio. Tienes razón (casi siempre la tienes...) y es cierto que los sueños, sueños son...como dijo antes que tú, el Señor "de la Barca" (que no el Señor del Barça...) pero creo que en los sueños, es difícil equivocarse, es difícil tropezar, al menos en mis inventados sueños, dónde siempre ganan los buenos y todos están sanos y van vestidos en tonos pastel... otra cosa es la realidad... ¡Ay amigo! ahí no paro de tropezar, de equivocarme y de ver bondad y nobleza dónde no la hay...
¿Aprenderé alguna vez a no mezclar lo que quiero y no puedo (o no debo)? Creo que aún, hay esperanza...¡¡¡ soy tan joven a mis 47 años!!!
Un placer tu visita. Tarde del domingo, bendecida.
Nadie da lo que no tiene. Lo que tenemos lo hemos adquirido de muchas maneras, lo hemos hecho nuestro, y nos hemos construido desde esas historias. Pero no nos confundimos con ellas necesariamente. El recurso literario ni nos agota, ni nos sustituye. Vale soñar, ¿por qué no? sin olvidar que los sueños, sueños son.
ResponderEliminarGracias por tus palabras, querido Preludio.
ResponderEliminarTienes razón (casi siempre la tienes...) y es cierto que los sueños, sueños son...como dijo antes que tú, el Señor "de la Barca" (que no el Señor del Barça...) pero creo que en los sueños, es difícil equivocarse, es difícil tropezar, al menos en mis inventados sueños, dónde siempre ganan los buenos y todos están sanos y van vestidos en tonos pastel... otra cosa es la realidad... ¡Ay amigo! ahí no paro de tropezar, de equivocarme y de ver bondad y nobleza dónde no la hay...
¿Aprenderé alguna vez a no mezclar lo que quiero y no puedo (o no debo)? Creo que aún, hay esperanza...¡¡¡ soy tan joven a mis 47 años!!!
Un placer tu visita. Tarde del domingo, bendecida.
Lo sabemos, y sin embargo...
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