Bajé el ritmo, para ver si al adelantarme, me libraba de él, pero también, bajo el ritmo de la carrera, así que me giré y le pregunté:
-¿Qué? ¿está bien el ritmo? ¿lo cambio, o seguimos así...?
-Perdona, ¿te he molestado?
-Bueno, no me gusta ser entrenadora personal sin recibir nada a cambio
-Y ¿Quién te dice que no vas a recibir nada a cambio...?
Paré la carrera y miré de frente al individuo que me seguía. Tendría aproximadamente 20 años, los ojos negros y el pelo castaño. Las pecas sobre su nariz le daban un aspecto infantil que contrastaba con sus facciones duras y rotundas. Tenía un cuerpo perfecto, bien torneado, fuerte y muy atractivo...
-Me llamo Alicia, ¿tú?
-Juanjo, y he venido a Madrid a hacer un casting.
-¿Eres actor?
-No bailarín.
-Umm, que interesante, cuanto te quedarás?
-Mañana mismo vuelvo a Granada.
Durante mas de dos horas, Juanjo me contó su vida y su lucha por salir de la tienda donde trabajaba, el sacrificio que significaba ensayar después del trabajo bajo la mirada crítica de su familia, en especial de su padre que no entendía esa pasión por la danza clásica, era demasiado "femenino" para el hijo del dueño de una ferretería...
Tenía "gustos tan extravagantes" que en su pueblo no eran muy bien entendidos ; pasión por la lectura, el arte, el teatro... desde hacia unos meses, colgaba posts en un blog que me resultó muy familiar...
¡¡¡ EL MUNDO ES UN PAÑUELO !!!...
Ademas de un nick ahora conozco un rostro... y un "cuerpo" (y ¡qué cuerpo...!)
-Bueno, además de tu entrenadora personal y paño de lágrimas tengo que irme a trabajar, así que hasta la vista y que tengas suerte en el casting.
-¡Eh!, no te he dado nada a cambio de "tus servicios"
- Dedícame un post en Blogger, con eso me conformo...(o mejor, se lo dedico yo a él... porque el beso de despedida, pagó con creces, el tiempo de "mis servicios"....)
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