Me dolió, si me dolió, para que voy a negarlo...
Hace una eternidad que escribo. He tocado casi todos los ¨palos literarios¨, desde el relato romanticón, pasando por la ciencia ficción, y hasta me he atrevido a tocar el erotismo, el terror, la parodia... y eso si, aunque de puntillas y con más miedo que vergüenza, hasta la poesía. Asi que no me digais que no es para que duela, que tu
¿mejor amiga
? tenga el valor de regalarte un curso/taller de escritura creativa...
Me ha sentado mal. Si, ¡qué quieres que te diga! No es que yo me las de de nada, escribir es solo un hobby, pero... no se, yo hubiera preferido un perfume, un pantalón, o incluso unas entradas para el teatro, un Spa... en fin, los típicos regalos de las amigas que se supone que te quieren...y yo, este regalo me lo tomé como:
-Toma, anda, ve a este curso, a ver si consigues hilar tres frases sin decir tonterias...
Ufff.
El horario no estaba mal, y me pillaba, justo enfrente del trabajo, asi que a la salida, decidí pasarme, pensé; bueno, echo un vistazo y si no me va, con no volver, ¡listo! Pero antes de escuchar ni una palabra, y nada más entrar en la clase, decidí que iba a apurar hasta el último minuto del curso...
¿Por ?, y... ¿Ese cambio tan repentino?
Cuándo entré el primer día y vi al mismísimo ´Adonis¨ al frente del taller de escritura, entendí que el regalo, tenía una doble lectura....
-Por favor, id tomando asiento. Vamos a empezar. Me llamo Santiago y durante cinco días vamos a llevar a cabo una taller literario. Hablaremos de las distintas técnicas que podemos usar a la hora de redactar textos, cómo ser creativos en la elección de temas, y distintos recursos literarios que nos van a ayudar a hacer...- y yo la verdad es que no recuerdo nada más...porque yo no escuchaba lo que Santiago estaba diciendo, yo me lo estaba imaginando en la barra de un bar, haciendo un streptease...
Me arrepentí de lo mal que había juzgado a Sonia por hacerme ese ¨original regalo¨ ¡Qué tía! yo que creí que era un
regalo-envenenado y resulta que es un
regalo-bombón... Le mandé un SMS de inmediato:
-¡Jo tía, ya te vale! ¡Vaya pedazo de semental! ¡Recuerdame que te compre un piso! ¡Está para mojar pan!
A los treinta segundos me contestó:
-Tía, ¡estás fatal! ¡no entiendo ni media palabra! ¿de qué vas?
No iba a perder ni un segundo de esa visión celestial que tenía enfrente, asi que ya contestaría a Sonia al terminar la clase.
-Disculpa ¿tu nombre?
-Ahhh! ¿Es a mi?
-Si, nos estamos presentando y contando nuestra experiencia como escritores.
Santiago hablaba pero yo estaba tan extasiada mirándole que no escuchaba ni una palabra...
-Bueno, si, perdona, es que estaba atendiendo un asunto muy urgente de trabajo... pero ya he apagado mi movil y soy toda tuya... bueno... quiero decir que... ¿cuánto dura la clase?
-Aproximadamente un par de horas, primero será teoría y terminaremos con un ejercicio práctico, pero luego llegaremos a ese tema, ahora dinos tu nombre y qué experiencia tienes.
-Me llamo Marian y bueno, experiencia... no mucha...bueno, depende... con los hombres no he tenido demasiadas experiencias gratas.
-¿Disculpa? Me refiero a experiencia en la escritura.
Mi cara se puso de color granate... cuándo escuché a Santiago y alguna risita de fondo de mis compañeros...quería que me tragase la tierra...
-Tengo un blog, y gané un concurso de cuentos en el colegio...
Bueno, pues, ya esta! Ya me he ganado el título de:
-la tonta de la clase-
Cuándo terminó el taller, me acerqué a Santiago.
-Te debo una disculpa, he estado muy distraida al principio de la clase, pero es que tengo mucho lio en el trabajo y es dificil desconectar...
-No te preocupes. ¿Te ha gustado la clase?
-Si ha sido muy amena y se me han pasado las dos horas en un santiamen!
-Bueno, me alegro, Ahora tengo otro curso, si me disculpas...
-Pues hasta mañana!
¡Qué voz! ¡Qué ojazos! ¡Vaya manos! ains...
Al día siguiente, mis compañeros se volvieron a mi paso... a lo mejor... me había excedido un poco arreglandome y dejaba detras de mi, el aroma de mi perfume más sofisticado.
Si, tal vez me había pasado un poco... ¡total! para ir a una clase de escritura creativa, no era preciso enfundarse en un Dolce Gabanna...
-Buenas trades ¿Qué tal el ejercicio de ayer? ¿Algún voluntario para compartirlo con los demás?
Levanté la mano
-Marian, ¿verdad?, adelante!
-Si, Marian,
-Recordaba mi nombre...Ummm, buena señal...- y empecé a leer el primer ejercicio:
¨La vida te da sorpresas¨ utilizando las 17 palabras que nos propuso.Hubo, risitas de mis compañeros, pero a mi solo me importaba la opinión de Santiago.
-Bien, divertido y creativo. ¿Basado quizás en un hecho real? Os advierto que casi siempre la vida real supera la ficción, y lo que vivimos cada día puede ser una excelente fuente de inspiración que nos permite dar rienda suelta a la imaginación y de ahí pueden salir textos tan interesantes como el que Marian, acaba de compartir.
El segundo día pasó tan rápido o más que el primero ¡Bendita Sonia! ¡qué buena idea regalarme el curso! además de regalarme la vista, estaba aprendiendo muchísimo. Cuando estaba casi en la puerta, Santiago me llamó.
-Marian; ¿tienes un momento?
-Pense: - Dispones del resto de mi vida para ti, cariño, pero solo dije:
¡Claro!
-Tienes mucha facilidad para escribir, eres creativa, ¿Trabajas en algo relacionado con esto?
-Pues no, no tiene nada que ver, soy economista.
-Bueno, entonces es un don natural, te animo a que sigas trabajando y aprendiendo. Talento hay mucho en el mundo, pero hay que acompañarlo de trabajo si quieres conseguir algo en la vida. Tu nivel liteario comparado con el resto de tus compañeros es alto. De vez en cuando, el trabajo te trae gratas sorpresas, como tu presencia. ¡Así da gusto dar clase!
¿Qué estaba diciendo? ¿Qué le gustaba?, ¿Qué quería ser mio para siempre? ¿Qué utilizara su cuerpo para mi deléite?
-Si, la verdad es que imaginación no me falta... ¡¡¡Si tú supieras lo que se me pasa por la cabeza!!!
-Pués te animo a que lo utilices.
-¡De acuerdo! ¿Nos comemos?, quiero decir... ¿Nos tomamos algo?
-Jajajaja, lo siento, pero tengo clase en cinco minutos, tendremos que dejarlo para el viernes que es el último día del taller y acabo mi jornada con vuestra clase.
-Perfecto!, pues no hagas planes, que salimos de copas el viernes.
Cada día me gustaba más, la clase y... Santiago. Por una parte estaba deseando que llegase el viernes y por otra... sentía que el taller terminase... a lo mejor podría re-engancharme o probar otro taller que él impartiera en la escuela.
Llegó el viernes.
Al entrar en el aula, ¡casi me caigo! En lugar de Santiago, estaba al frente de la clase, una señora. Tenía el rostro muy agradable, rozaría los sesenta. Llevaba un traje sastre que le quedaba de maravilla. Tenía el pelo canoso y aunque era bajita su cuerpo era esbelto.Me recibió con una sonrisa cuándo entré.
-Ah! Perdón, creo que me he confundido de aula...
-¿Marian? No, no te has confundido, ésta es nuestra clase.
-¿Cómo? y ¿Santiago?
-¿Santiago? ¿a quién te refieres? ¿Algún alumno?
-No, no, el profesor del taller.
-Debes estar confundida, es nuestro último día de clase. Llevamos desde el lunes aquí, y he sido yo quién ha impartido las clases a este grupo.
Me senté, confundida y desubicada... Vamor a ver... Está claro, que esa era mi clase, el mobiliario, e incluso mis compañeros pero... ¿Dónde estába Santiago?
No pude concentrarme en toda la clase, no paraba de preguntarme qué estaba pasando...
-Ha sido un placer contar con vosotros en este taller de escritura creativa. Tenéis talento, ahora, solo queda que la inspiración, os encuentre trabajando. La imaginación es vuestra mejor arma, ¡UTILIZADLA! ¡dadle rienda suelta! ¡Esa será la clave de vuestros éxitos! ¡Soñad y atreveos a escribir esos sueños!
Decía Graham Greene, que; -´´Las personas reales están llenas de seres imaginarios..´´. Os animo a LIBERAR a los vuestros! La imaginación, os llevará al paraiso...
Así que... ¿Santiago era uno de esos ´´seres imaginarios´´? ¿Una especie de ´´necesidad´´ que había creado mi imaginación?
¡COMPLICADO! COMPLICADO llevar a cabo el último
Ejercicio de taller literario´:
Escribir una historia surrealista que tenga que ver con el desarrollo de nuestro taller literario.